Maltratador
Rey de golpe, marqués que ya ha
marcado
la piel de quien llamaste amada
mía,
miel amarga, anillo de casado
sin brillo al despertar el tercer
día.
¿Qué te dijo?¿con qué pudo
ofenderte?
¿qué habló, de qué dudó, qué cara
puso?
¿qué Nada le concedes, buey
obtuso?,
¿sin voz, sin opinión obedecerte?
Ya he visto tu portal, gran
semoviente,
ya voy a por tus astas afiladas
por ver si te las gastas tan
valiente,
con alguien que no teme tus
cornadas,
alguien con quien agacharás la
frente
¿Por qué, por qué?, dirás; diré: por
Nada.
1 comentario:
¡Me parece buenísimo! Lleva un ritmo trepidante para poner al abusón en su sitio. Eres todo un maestro de la palabra y del verso.
Publicar un comentario