miércoles, 17 de diciembre de 2008

ACERCAMIENTO

Si hago volar la cometa, es probable que llegue lejos, muy, muy lejos.
Allá abajo, hasta la misma orilla, mi amigo alcanzará a tomarla y sabrá que aún tenemos alguna oportunidad para jugar.
Lo malo va a ser que pueda devolvérmela hasta esta altura, desde la que siempre podré verlo.

7 comentarios:

Lola García Suárez dijo...

Isa, si no me equivovo la cosa sigue con el más allá. Si de por sí es tierno el relato, la idea de lo "alejados" que están estos niños lo enternece aún más. Muy bonito.

Peneka dijo...

Nada puede separar a dos corazones unidos, por ese hilo invisible del amor, de la amistad.
Hermoso, pero algudo "duro" si pensamos en que un niño ha dejado su sonrisa colgada en una cometa

LaRubia dijo...

Que enternecedor Isa, que dulce la amistad más allá del más allá, que dulces los niños de tus textos, que no tienen miedo a nada, son comprensivos y cariñosos.

inma dijo...

Creo que el amigo de abajo encontrará un viento favorable para hacer remontar de nuevo tu cometa y devolvértela cargada de besos.

Gabriel dijo...

Me llena de melancolía, me hace pensar en niños que saben que dejarán de serlo y sólo su amistad podrá quitarles ese miedo.
Un texto hermoso.
Besos.

Anónimo dijo...

Me emociona tu cuento desde las nubes. Me encanta con qué naturalidad
relatas el mito ancestral de la vida y la muerte.

Laura dijo...

Pues a mi la niña, porque me imagino que es una niña, me da un poco de miedo. Estos temas del más allá me producen mucho respeto (y algo de miedo).
Besos.