sábado, 2 de abril de 2011

La estación primaveral
ensalzada por poetas;
los músicos y pintores
se inspiran tambien en ella
y le dedican sus loas
y proclaman sus bellezas.
En contra, no tengo nada
de las bondades que cuentan:
es verdad que los jardines
y los campos hermosean,
con flores nuevas que brotan
al llegar la primavera.
Todo sería perfecto
si tuviese otra cara
a la que muchos se enfrentan.
Es voluble, variable,
es así la pajolera
y con la fama de hermosa,
alegre y cascabelera,
no es oro lo que reluce
al llegar la primavera.
Pues también llega cargada
de estornudos y lloreras,
picores, ronchas y pitos,
producto de las alergias,
pues esta bella estación
cargada de polen llega
y fastidia de lo lindo
a los que padecen de ella.
Por todo ello me atengo
a la realidad concreta
y no veo sólo bondades
en esta bella floresta.