jueves, 12 de marzo de 2009

Oniria

"Anoche cuando dormía soñé,
¡bendita ilusión!"
(Antonio Machado. Glosa LIX)


Acúname que quiero dormir.
Cerremos los ojos juntas y soñemos.

Ven hada
y te llevo a la grupa de mi caballo blanco
hasta la fuente fresca donde salta, baila y canta
el agua traviesa.

Camina conmigo hada
y te paseo por esa plaza,
azulejos verdes y grana,
donde desde mi niñez me hice muchacha,
contemplando pasar los soles, esperando el amor,
desde las rejas de mi ventana.

Acércate hada
y te aupo para que cojas
del limonero flores blancas
y así te conviertas en onírica belleza perfumada.

Te has marchado hada
y ya no quedan ángeles ni doncellas dulces que guarden mi cama
pero aún sonrío
porque en el duermevela de mi mañana
suena una cancioncilla que a mi recuerdo reclama:
pegasos, lindos pegasos, caballitos de madera...

Microrelato

Y él, que consideraba insuficientes sus dos brazos,
pidió a cualquier Dios que lo escuchara
tener el modo de poder tocar y abrazar todo lo hermoso.
Su deseo le hizo convertirse en un mar.