¿Quién dijo que la magia no existe? Sí, en plena feria del libro, se cumplió un hermoso sueño: Cantar en público. Y lo hizo un sábado por la tarde con la feria a reventar. Los libros nuevos se sintieron acunados por tan hermosa voz y los aún por venir celosos de no haber podido estrenarse allí. Y todos los presentes emocionados con una voz que poco a poco te calaba el alma, y se dejaba oír desde los stands de la plaza hasta en el Ayuntamiento, elevándose un eco hasta la Giralda con aquella canción que nos hablaba de Libertad.
Y tan hermoso como el canto, fue el grito de una pequeña rubia que nerviosa y risueña decía: ¡Es mi mami, es mi mami!
¡Enhorabuena Isa!