(DEL CUADRO DE CHAGALL)
No me busques en la casa, ni en la cama, ni en tus brazos. Si
es que quieres encontrarme, mira arriba, para el cielo. Ahí, donde recorro cada
noche lo que fuimos, y enciendo con mis recuerdos los tejados y las torres y
las nubes y los vientos.
No me busques a tu lado, ya no estoy, ya no es mi sitio. Si me quieres
encontrar, yo te espero donde nacimos un día, y donde la noche sigue
regalándonos la magia de sabernos a salvo.