jueves, 11 de marzo de 2010

LA CIRILA

Hoy va de coplilla. Es de la época de mi madre. No tendrían muchas libertades, pero las suplían con coplas algo picantonas. Allá que va:


Soy el corneta de más pupila,
y el más granuja del batallón,
tengo citada a la Cirila,
que es una hembra que está jamón.
Pa conquistarla más facilmente,
me he puesto el traje de mi teniente,
pues de corneta cuando le hablaba
de mí se pito pitorreaba,
hoy de seguro no hay pitorreo,
porque al mirarla la tambaleo.
Hoy la Cirila viene por mí,
cuando al mirarla le digo así:

ESTRIBILLO

Ven, Cirila, ven y verás, y verás un oficial.
Ven, Cirila, ven que te aguarda
el teniente más juncal
y que te quiere de chipén.
Cirila, ven, que me late,
que me late el corazón.
Ven, Cirila, ven y cálmame este tip
tipi tipi tipi ton.

Ya la Cirila escarmentada,
con militares no quiere nada,
pues le molesta la cajetilla,
para que él fume cuando la pilla,
pues ellos quieren chupar del bote,
y ella no puede con tanto trote,
ya no se rasca más el bolsillo,
porque está harta de tanto pillo,
ya no le gustan los militares,
soldados rasos ni oficiales,
que al licenciarse van a su tierra
y de las primas ya no se acuerdan.

AL ESTRIBILLO.