domingo, 23 de marzo de 2008

Hallado un fósil de la cáscara de un huevo que revela la existencia del primer ser inteligente del planeta

En unas excavaciones rutinarias en el norte de Europa, unos paleontólogos han hallado los restos de la cáscara de un huevo de dinosaurio, con un mensaje cifrado en su cara interna. Según uno de los expertos podría tratarse de un dinosaurio volador que, con la punta de sus garras, ha logrado tallar en el material calcáreo un mensaje sin precedentes. Tras varias semanas de investigación ha logrado conocerse la información que encerraba el extraño código compuesto por formas geométricas. Ésta es la transcripción del mensaje, cuyo contenido revela que el hombre no fue el primer ser racional de nuestro planeta.

“Me llamo…Bueno, no sé cómo me llamo. Es decir, sé cómo me llamo pero no sé cómo querrá llamarme mi madre. En fin, soy X. Hasta donde mi conciencia llega llevo varias semanas recluido en el interior de un huevo. A medida que pasa el tiempo me siento más incómodo. Desde hace veinticuatro horas estoy intentando romper la cáscara, pero no puedo. Estoy cansado. Tengo una pata metida en el ojo y mi espalda es casi un círculo. Así que he llegado a una horrible conclusión: no podré salir de aquí. He notado cómo mis hermanos han logrado salir de su encierro y los oigo chillar constantemente. Pero antes de morir, quiero dejar constancia de mi paso por este mundo.

Por lo que he oído del exterior creo que mi especie no es nada avanzada. Mi madre grazna y los sonidos de otros seres que me han llegado son puras onomatopeyas. Puede ser presuntuoso por mi parte pero creo que soy el primero con inquietudes que van más allá de devorar y luchar. Espero que esto lo lea alguien en un futuro, aunque viendo lo que me rodea no creo que quien lo haga sea uno de los míos.

¡Qué sensación más angustiosa! Creo que me falta el aire. Ahora veo las sombras de mis dos hermanos sobre mi cáscara, aparte de chillar no dejan de darse cabezazos entre sí. No podré desarrollar juegos de estrategia con estas criaturitas. También veo a la que creo que es mi madre, o eso me dice mi instinto. Hace días que no posa su trasero sobre mí. Mala señal.

Solo quiero que me conozcan y que sepan que conmigo se pierde un importante eslabón. Después lo justificarán todo con el eslabón perdido. ¡Aaaaaagh! No puedo escribir más. Mi cuerpo ha excedido de su contorsionismo. Cuando quieran referirse a mí, por favor, llámenme simplemente X.”

6 comentarios:

Isa dijo...

Muy bueno, Loli. Me encanta esa idea del eslabón perdido, la originalidad de la naturaleza del personaje y lo bien que lo has resuelto.

Gabriel dijo...

¡Juasjajay!
Me encanta.
Primero: la pulcritud en la escritura. Entre carta, diario y testamento, con una carga de melancolía. ¡Qué pena de evolución truncada!
Aquí se va dejando caer una capacidad camaleónica grande. Y el humor elegante, señora, que sabes dejar caer.

Diáfana dijo...

Ay, Loli, que arte.
Me encanta la verdad de la historia.
¿Cuántos poyitos se sentirán así de asfixiados escondidos tras sus libros, su ordenador y su mente en plena ebullición ante los energúmenos que les rodean?
Muy bueno, nena, como la vida misma.
Y, sobretodo, muy divertido :)

inma dijo...

¿Qué tamaño tendría ese huevo para escribir tanto código? Pena que ese ejemplar no naciera.

Lola García Suárez dijo...

Hombre, si el huevo era de dinosaurio sería grandecito, digo yo. Y es que el polluelo le cogió gusto a eso de escribir.

Peneka dijo...

Bueno no, buenísimo.
No me cabe ninguna duda quien va a ser el primer premio del segundo concurso "paraleernos".
Sí señor, te prodigas poco entre nosotros, perocaray, que gusto da encontrarte y llerte.
Muy bien escrito y con un final,que no desmerece al texto entero. Buenos pildorazos, y gracias por haber escrito cuento tan "histórico"(por lo de dinosaurio, claro está)