lunes, 20 de diciembre de 2010

Azotea de invierno

Tras el fuerte azote del viento
y la implacable lluvia del otoño,
en mi pequeño rincón de macetas
amarillean los jazmines y los ficus…
Pereció la rosa,
tirita desnuda la bignonia.
Muda de reuniones, a la luz de las velas
duerme mi azotea hasta la primavera.
La hamaca, recogida,
guarda confidencias
selladas bajo la "tramposa" luna de verano.
Temblorosas pero firmes,
mis plantas aromáticas
atesoran su fuerza vital en sus diminutas semillas
Igual que mi jardín,
mi corazón resiste a duras penas
los fríos preludios del invierno.
Pero aquí y ahora
he descubierto, con asombro,
mi flor de Navidad, de nuevo florecida.

4 comentarios:

Gabriel dijo...

Este poema es extraordinario.
Cada trozo de vida y de sentimiento, tiene su flor. Hasta ese final de asombro.
Una delicia.
Besos.

Isa dijo...

Otra vez. De nuevo, la esperanza. Siempre nos regalas dosis de esperanza en tus escritos, y este poema es una maravilla. Y qué final, Inma, qué final magnífico.

Como dice Gabriel: una delicia.

Gracias por ello y por tus elogios hacia mí en el comentario al poema que Gabriel me ha regalado y que tanto ha supuesto para mí. Gracias porque esto es un sueño y vosotros estáis siendo el mejor público que se puede tener.

Un abrazo.

P.D: Me encantó compartir contigo y con tus versos, espacio ayer tarde. Que vengan muchos momentos como ése tan hermoso, que vivimos los "paraleérnicos" y compañía. Y qué compañía.

Peneka dijo...

Siempre la esperanza...
Siempre una sonrisa...
Luchar siempre...

Hasta el frío invierno, tiene su pequeña edelweiss.

Besos de versos,artista

Lola García Suárez dijo...

Tan hermoso y tan cercano como tú, Inma.