domingo, 2 de diciembre de 2007

FUE NADA

El vacío y la decepción imperaban:

la nada se extendía sin remedio.

Sólo el logró huir,

casi cortando el viento.

Un intenso escalofrío le atrapó. Apenas quedaba tiempo.

Las mágicas melodías de su mundo se apagaron

enmudecidas por un horrible lamento.

La esperanza dio paso a la desesperación

cuando la fría guadaña rozó su cuerpo.

Era la primera vez que sentía dolor.

Dolor verdadero.

Entonces su mirada se tiñó de azul.

La nada alcanzó su objeto.

Bajo un sucio cartel se halló sepultado.

Todo estaba hecho.

Ya nadie soñará con unicornios.

La fantasía ha muerto.

(prosema)

7 comentarios:

Lola García Suárez dijo...

He tirado de archivo. Prometo algo nuevo, como dije a Isa. Pero éste fue mi primer "prosema" (mi poesía no puede dejar atrás la prosa).

Gabriel dijo...

Bienvenido el prosema, su estilo y su valentía. La mitología, cuando se identifica con sueños verdaderos, siempre nos dice alguna verdad. Como en tu prosema.

Peneka dijo...

Espero que el sentimiento que porvocó este poema, viva lejos en el tiempo, y que ahora la luz impere por todos los rincones.La imaginación existe y los sueños también se hacen realidad

Isa dijo...

Tiene un significado que me impacienta, que me coloca ante la realidad en la que estamos instalados y me angustia este "prosema". Creo que cuando uno escribe algo así, lo que intenta es mover las conciencias. En mí se ha cumplido ese objetivo.
¡Viva la fantasía y dejémosla fluir con las palabras!

Ailema dijo...

Me gusta esta forma de expresión. La intentaré ya que soy tan mala haciendo versos convencionales. Tiene partes que me han tocado: "...era la primera vez que sentía dolor. Dolor verdadero..." y el final "la fantasía ha muerto". Rotundo.
También soy pésima poniendo títulos, pero este que has elegido es lo único que no me convence. No creo que fuera nada. Fue mucho. Fue todo.

Anónimo dijo...

Dónde andará escondido el último unicornio. cuándo se dignará a aparecer para que se deje acariciar mientras me purifica. Ya lo sé, lo he encontrado. Soñaba su propia muerte en tu prosema. Tuvo una pesadilla tan brutal, que se tuvo que pellizcar el cuerno para notar que seguía vivo.

Lola García Suárez dijo...

Ailema, fue mucho y fue todo. Pero en este caso la nada es la protagonista.
Lorenzo me parece que tu comentario sería la mejor continuación para el prosema. Me encanta tu visión.