El alquimista, desesperado, recordando días de naturaleza viva, probaba a mezclar esencias que le ofrecieran el aroma anhelado, buscado, soñado…
...Pero ya se habían extinguido las flores.
Publicado por
Isa
en
viernes, marzo 28, 2008
Etiquetas: Isa
6 comentarios:
Una microhistoria terrorífica, porque desgarra. Y muy hermosa. Justo al terminarla de leer, busco una flor y respiro mucho más tranquilo.
Mi ventana está llena de flores ¡uf! no tengo de qué preocuparme.¡Pobre alquimista!
Espero que ese día no llegue nunca. Es un relato inquietante y triste.La esencia en tarro pequeño.
Ayer entró por la puerta de la terraza un golpe de olor a azahar que me dejo quieta por unos instantes como un perrito con la nariz hacia arriba olisqueando.
Yo tengo esperanza de que la naturaleza, siendo como es mucho mas lista que nosotros, un día se cabree y acabe con este sarpullido cojonero que somos los humanos.
Si tomo distancia del ser humano, pienso lo mismo, sobre todo porque, unos más que otros, seremos los culpables de nuestra propia destrucción. Pero, como a vosotros, me tranquilizan las flores de mi patio. Gracias a todos.
Menos mal, que aunque a regañadientes, la primavera ha llegado inundando todo de color...y de flores. Ya verás, ya veremos, como el alquimista resurgirá de sus "esencias" y llenará el mundo de formulas embriagadoras
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