martes, 23 de septiembre de 2008

6 comentarios:

inma dijo...

Triste historia de amor con muchos tintes de realidad ¿Quién no es a veces ella y a veces él?
Un beso fuerte por tu regreso.

Gabriel dijo...

Qué miradas tan precisas, alternativas de realidad y deseo, tan finas. Tan verdad.
Besos.

Isa dijo...

Es peligroso, Irene, saber, pero no saber cómo. Lo bueno es saber reaccionar a tiempo. Como dice Inma, tu relato transmite "muchos tintes de realidad" (bonita frase, Inma), en los que muchos podemos, de uno u otro modo, sentirnos reflejados. Un beso.

Peneka dijo...

Irene,tu relato va directo, sin evitar los encuentros. Lo has construido de una forma sencilla, con tu frescura y tu saber hacer.
Si tuviese que decidir(me resultaría realmente dificil), creo que me quedaría con la frase que ambos personajes comparte..."pero no sabía cómo".
Del final no puedo decir más que es redordo, lleno de fuerza y directo al ventrículo izquierdo.

Un besote y un palote(ah, y me encanta tenerte entre nosotros)

Anónimo dijo...

"Ahora que me escuchas, decirte que aún estamos a tiempo". Con lo bien que estarían a 200 por hora, haciendo lo que "haiga" que hacer, en el AVE por ejemplo, tan seguro, tan agustito. ¿Quién será más valiente?

Lola García Suárez dijo...

Cómodos y complacientes. Sí, quizás deberían cambiar el argumento de sus vidas pero, no es fácil encontrar un buen guión.