sábado, 15 de mayo de 2010

...PUES DE DAR UNA VUELTA.

Sin llamar y sin luz,

Me colé por la boca del lobo.

Igual que el avestruz.

Y era negrura tal,

Que lloraba por una velita:

Una chispa, era igual.

Repasé de una vez

mi película entera, mi vida,

buscando sensatez.

Y en lo negro una estela,

una voz y una vela,

y la mano de mi alma gemela.

Le dediqué un mohín

a ese dios de los días perversos.

La leyenda es así,

tan verdad como dicen los versos:

Del momento peor

donde el alma se quiere perder,

con un gesto, al dolor

se le invita a desaparecer.

5 comentarios:

Isa dijo...

Cuánto celebro yo este mohín que ha acabado con la oscuridad de esa boca de lobo feroz, que te tenía aprisionado.
Cuánto agradezco esa mano amorosa y firme que rescata a los espíritus vagabundos.
Y cúantas ganas de tenerte aquí, con nosotros. NO TE VAYAS MÁS.
Un beso grande, grande.

Peneka dijo...

Abro de par en par mis puertas.
Engalano mis balcones.
De flores lleno arriates
De alegría los rincones.
¡Qué ha vuelto Gabriel!.

Me uno a las palabras de Isa. Esta casa no es igual si TÚ NO ESTÁS EN ELLA.

No te vayas más..., por favor

Un ramillete de besos

Clea dijo...

¡Qué bonito y qué bien!

Yo también me alegro.
:))

♫♪♫♪♫♫♫♪♪♫...

inma dijo...

Hoooooola! Me alegro que encontrases tu luz perdida y el camino de vuelta.
Precioso el poema que te devuelve a nosotros. Un besazo enooooorrrrrme!

Paquita dijo...

Que alegria haberte recuperado,
Gabriel no nos dejes más quesin ti
este blog noes igual. El poema es-
al menos parami-muy emotivo,gracias por estar de nuevo entre nosotros.Un beso