sábado, 29 de mayo de 2010

SI TE PROPONGO...

Si me propongo enamorar

no lo consigo.

En general.

Repito y digo

que esto se tiene que arreglar

o aquí no sigo,

pues me voy a defenestrar.

Hasta el camarero del bar,

el comedido,

me dice que al verte marchar

pensó, encendido,

que dejé la vida pasar

y que tu olvido

mucho no tardará en llegar.

Y yo, jodido.

Cómo puedo recuperar

tus atenciones,

si te fuiste sin avisar

por Vodafone,

por Cableuropa o Movistar,

dejando en casa sin planchar

mis pantalones.

Anda, Gertrudis, vuélvete,

cambia el billete.

No digo que arrepiéntete,

¡Cuenta hasta siete!

Y mientras yo te pongo un té,

refréscate y desvístete,

que un buen polvete

resuelve bien cualquier sainete.

Ah, ¿que no lo piensas consentir?

¿qué no es mi oferta suficiente?

¿que no me pare: hay que seguir

cada polvo con el siguiente?

Siento tenerte que decir

que ese contrato es mal apaño,

pues lo que pides es pedir

en un día solo lo de un año.

Adiós, Gertrudis, coge el Ave;

ya pondré yo la lavadora.

Y tus costumbres amadoras

algún coloso, en fin, quién sabe

las lleve a cabo a todas horas.

Que yo me vuelvo a mi sofá,

que va empezar mi partidito,

y puede que después, quizá,

un video en tono subidito

me haga pensar en algo más.

Tú te lo pierdes, cariñito.

5 comentarios:

Paquita dijo...

Dejala que se marche,no te conviene
-melones-, si ni te quiere planchar los pantalones. nada lo dicho, buscate otra que te atieda
mejor en todo, todo, genial como siempre, qurido Gabriel. Un beso

Isa dijo...

¡Ja, ja, ja, Gertrudis, qué exigentona! Di que sí; que un sofá para uno sólo es motivo de renuncia suficiente. Y mientras, a hacer reserva de energía, que nunca se sabe lo que pueda presentársele a uno.
¡Qué bueno, hijo! ¡Cuánto echaba de menos reírme contigo!
Un beso.

Peneka dijo...

El que no se consuela es porque no quiere...
Fogosa mujer, esa Gertrudis, que al pobre me lo amilana, y de un refregón, me lo hecha a las labores de la casa...

Genial Gabriel.De nuevo la frescura de tus versos, tus locuras y sonrisas a granel...
Ahora, ya estámos todos.( Bueno, los niños poetas que andan por esos mundos de dios y que espero algún día vuelvan).

Clea dijo...

JAAAAAJA. (Carcajada de domingo con este regalo "kraheiano").

Vuelve Gertrudis y sopesa
tu decisión cuantitativa,
toma la nave por sorpresa
y exponte en tierna disyuntiva:
¿Hoy en la cama o en la mesa?

(Glup)

:))

inma dijo...

Esa Gertrudis... pobre poeta, con lo apañaito que se ve, y tan incomprendido. Me ha alegrado tu poesía la mañana. Un besazo