miércoles, 13 de febrero de 2019

CALOR DE HOGAR

Amasamos. Se nos llenan las manos. Ha subido generosa la mezcla y crece. A veces, nuestros dedos se tocan. Seis manos que se mueven obedeciendo a tres corazones que van dando forma a un amor por hornear.
Comemos. Enlazamos las manos sobre la mesa de madera y metal que nos acoge. La mezcla fría que antes nos llenaba las manos, ahora nos cruje en la boca. Tres bocas regadas con vino y con fruta, que ríen, que se acercan que comparten con una irresistible intimidad, la alegría de tenerse. 
Nos amamos. Hemos cocinado a besos un hogar invencible. 

5 comentarios:

Gabriel dijo...

Delicioso.

inma dijo...

¡Cuanto daría por estar en esa cocina! Es precioso el relato y el ritmo de amasado que imprime.un besazo.

isa dijo...

Teníamos que recrear un triángulo amoroso en cualquiera de sus manifestaciones: con confrontación, desde la infidelidad, tres personas involucradas de alguna forma en un conflicto amoroso, pudiendo hablar de amor y abandono, de despecho y demás fealdades. Y yo elegí que se amaran mucho los tres.
Me encanta que os guste. Gracias. Y besos.

Paquita dijo...

Me ha encantado. Besos.

isa dijo...

Gracias, Paquita. Qué alegría. Besos para ti.