Anoche habló el Papa y me quedé estupefacto.
-¡Ni una bomba más! –tronó.
Entendimos que ni una atómica, y un guiño del secretario personal nos lo confirmó.
La gran mesa nos dividía: Junto a él, los doce que podían pagarla. Enfrente, los doce que dependíamos del PIB para apenas dar la entrada y acordar los plazos.
De forma sibilina, los doce se acercaron al Santo Padre hasta recrear de modo fidedigno la escena de la Cena, en una coreografía perfecta.
Pero no sería tan sencillo: Traíamos popes, brahmanes y santones. Y bien provistos de escapularios y huesecillos mágicos. Incluso un zombie auténtico.
Sonriente y conciliador, se levantó y leyó el verdadero mensaje, el gran Misterio:
-Armaos los unos a los otros como yo os he armado.
Y extendió doce albaranes.
martes, 20 de noviembre de 2007
Habló el Papa
Publicado por
Gabriel
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martes, noviembre 20, 2007
Etiquetas: Gabriel
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3 comentarios:
_¿Y este Papa sin un comment? Con la iglesia hemos topado ¿No se puede hacer ni un guiño?...
_No, que es pecado y luego hay que confesarse.
_¿Confesarse?, ¿y eso qué es?
Silencios de confesión. Embustes. Satanás al lado de los mari-clones. Anda ya. Si ya tuvieron lo suyo. Animalitos, déjalos. Como saque yo la espada papal de las palabras... ajolá que no, que soy mu cafre. Y perdóname Jesucristo. Ah! Y sin condón, que no hay ni sida en Africa ni ná. Mu chula tu imagen pictórica de la "santa cena", compi.
Vamos a llamar al Opus, "pa" que "to" lo arregle, y "pa" que le quite a Loren la espada esa que tiene. A éstos les vendría bien una de esas. No hay mejor defensa.
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