domingo, 24 de febrero de 2008

A MI HIJO JAVI

Llegaste un día
Tarde hermosa de otoño
Y en mí la vida

7 comentarios:

Lola García Suárez dijo...

He sentido un vuelco en mi corazón...

inma dijo...

Sin duda, lo tuyo son los haikus.Emocionan, conmocionan,¡son auténticos!

José Antonio dijo...

No conocía tu faceta de creadora de haikus. Muy emotivos. Sencillez, calidez, calidad.

Isa dijo...

Gracias, Inma, Loli. Seguiré intentando alguno que otro.

Isa dijo...

José Antonio, gracias, amigo. Tienes en parte la culpa de los renglones que yo he volcado en estas páginas y lo sabes. Fuiste tú quien me despertó la necesidad de escribir un día, algunos años atrás, en la terraza de la playa, cuando hablábamos de las cuestiones amorosas, de los conflictos
hombre-mujer,¿recuerdas?; y usaste ese ejemplo y nombraste París. Ese día decidí comenzar una historia que aún no he acabado; ese día comencé esta fantástica aventura de crear. Gracias por ello, por tu paciencia lectora, durante muchos fines de semana, y por lo que me has enseñado.

José Antonio dijo...

Me emocionan tus palabras, pero si algo tuve que ver en tu vocación es porque el terreno ya lo tenías sembrado. No sé si regué algo, pero estoy seguro que con la lluvia de la vida hubiera germinado de todos modos. Sigue floreciendo.

Gabriel dijo...

...Sólo para darte las gracias, Isa, por estos versos.